Las olas se desperezan sobre la playa y el seseo de la espuma me acompaña por la orilla. El sol arrebola el horizonte y vislumbro, entre los primeros paseantes, esa sonrisa en la que tanto nadé. Se acerca bajo una mirada de sorpresa y de antigua complicidad. Los besos en la mejillas se deslizan en el extraño roce de la nostalgia. Las frases del paso del tiempo y lo poco que hemos cambiado, nos disfrazan detrás del humo de nuestras cenizas. Rescoldos heridos por el hielo de los años ausentes. Declino la invitación a tomar un café y la aplazo a otro día aún por dibujar en el calendario. Nos despedimos. La mar va borrando nuestros pasos sobre la arena. Y, durante unos instantes, siento la tentación de girarme, correr y decirle: aquella historia no estuvo tan mal. Pero sé que el pasado es como la ficción, niebla que zigzaguea entre realidad y espejismo.
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*El encuentro, es un microrrelato que escribí para el blog del escritor Diego Lopa Garrocho: Blog del Rosa al Amarillo. Blog que recomiendo por sus interesantes entradas literarias del autor y de poetas y escritores invitados.
Este escritor onubense, administrador de sueños, como se define, es autor de Las caras de Huelva, William Martin, el hombre que nunca existió, Mis sueños en 39 colores, entre otros.
absolutamente bueno!
ResponderEliminarsaludos
Omar, muchas gracias por venir a leer el microrrelato a este Café literario. Después de tanto tiempo me emociona que los amigos del blog pasen y me dejen su amables palabras.
EliminarUn abrazo enorme hasta Uruguay
Felicidad, me encanta volver a leerte de nuevo.
ResponderEliminarTu micro rezuma esa agridulce sensación que nos acompaña cuando, por una parte, hemos hecho lo que creemos correcto y por otra nos quedamos con ganas de más.
Tu trabajo, como siempre, impecable.
Allá voy, a pasear del rosa al amarillo.
Besos.
Gracias Belén por tu lectura, por seguir este Café Literario, que en los últimos tiempos abre muy pocas veces y por esas palabras que animan a continuar en esta pasión literaria que compartimos.
EliminarBesos, poeta.
Hola felicidad, me alegra ver tu microrrelato.
ResponderEliminarEl pasado vuelve al presente continuamente como las olas del mar.Cuando nos negamos a dar una oportunidad a algo que quedó a medias, seguro que perdemos algo de felicidad-
Solo paso a decirte que por mi delicada salud me veo obligada a descansar quiera o no, una larga temporada. Nos vemos en octubre si estoy mejor.
Te dejo un beso de ternura hasta entonces.
Sor. Cecilia
Sor Cecilia, agradezco mucho que siempre, contra viento y marea, pases por mi blog, me leas y dejes tu certero comentario.
ResponderEliminarEspero, querida amiga, que tu delicada salud, te de tregua y muy pronto estés recuperada del todo. Te echaremos de menos en estos meses de descanso pero todo será para bien.
Un abrazo fraterno cargado de los mejores deseos para tu pronta recuperación
Mi querida Felicidad, no te había visitado porque mis actualizaciones han tenido problemas, espero que bloguer no presente más complicaciones.
ResponderEliminarAl leer tu micro relato, imposible no recordar vivencias personales. El paso del tiempo no puede borrar las emociones sentidas, por esa razón, cuando por algún intersticio del destino nos volvemos a reencontrar las ansias del retorno siempre quedan latentes.
Un gran abrazo amiga escritora.
Paso a saludarte y a dejarte mi huella.
ResponderEliminarFeliz verano!
Besitos.